Atmósferas pesadas, hedores grises de una noche solitaria, conjuros de un alma atormentada, rituales de una desolación contemplativa. Notas encantadas despiertan de las profundidades de un paisaje difuso.
Un lento cortejo fúnebre, un errante lleno de incertidumbre determinada.
Evocaciones místicas, invocaciones melancólicas, inmersas en una romántica y profana historia, llegando a una cierta forma de ceremonia color negro. Aullidos lejanos ecos de una habitación fría, perdidos en el abandono del hombre y el tiempo.
Las quejas de un fallecido.
La angustia de un niño en miseria.
Proyecto de origen frances a cargo del poeta y músico Tomás Bel, que además de pertenecer a proyectos de otros estilos musicales que van desde lo Experimental, Contemporaneo, Ambient, Modern Classical hasta el Drone, decide tomar un nuevo nombre para difundir sus fatídicas y funerales inspiraciones siguiendo el camino del black metal atmosférico, desolado, y de ambiente minimalista que tanto fue establecido por bandas como Xasthur.
Su álbum debut titulado simplemente "misericordes", consta de 4 temas, siendo el primero una pieza de introducción puramente ambiental. Las guitarras parecen arder desde el silencio en los temas siguientes, con largas frases melódicas que se entremezclan con la moribunda voz distorsionada y la batería que complementa los momentos mas atmosféricos de cada tema.
El último track del album, muy recomendado, es un tema de larga duración [18:41 minutos] donde las guitarras dan una sensación de miseria, donde todo está conectado con la oscuridad y la tristeza, el dolor y la desilusión, como estar atrapado en un túnel totalmente oscuro, con sus propios remordimientos y esperanzas rotas.
Finalmente las percusiones y campanas mantienen un ritmo que hacen exaltar esa atmósfera funeral del álbum. Recomendado escucharlo.
